NACER INOFENSIVA, DEVENIR EN GUERRERA

Yo nací inofensiva. Crecí inofensiva. Un cuerpo pequeño, delgado, frágil, con las rodillas raspadas y los ojos llorosos. Siempre la más pequeña, la más sensible, la más inofensiva. Mi cuerpo todo el tiempo jugaba en mi contra, nunca me lo dijeron directamente, pero...