Zazil Collins, es una poeta y programadora musical de la Ciudad de México. Como poeta hace parte de la generación de los años ochenta, publicó poemarios como Junkie de nada (Lenguaraz, 2009), No todas las islas (Conaculta-ISC, 2012), El corazón, tan cerca de la boca (Abismos editorial-Mantarraya, 2014).
En su actividad radial, desde el 2011, programa los contenidos musicales en Código CDMX, en donde también conduce el programa Balalaika, en el que semanalmente difunde música del mundo, que da cuenta de los mestizajes sonoros y de los procesos culturales y sociales implicados en ello.
Zazil cree que “no existe la poesía sin la música, ni la música sin la poesía”, de ahí su interés en vincular estos dos terrenos, en sus creaciones, trabajos de investigación musical y en el espacio radiofónico. Explora así las posibilidades literarias de la música y la musicalidad de la literatura. En esta oportunidad, Zazil nos compartió el trabajo de algunas ¡Genias! que han inspirado su trayectoria.
Una genia que la influenció en su adolescencia es Rita Guerrero (1964-2011) artista polifacética mexicana oriunda de Guadalajara, quien desarrolló su trabajo en diferentes campos, como cantante, actriz de teatro y cine. Tuvo a cargo la dirección del Coro de la Universidad del Claustro de Sor Juana -que actualmente se llama Coro Virreinal Rita Guerrero en su honor-.
Rita condujo programas de televisión entre los cuales se destaca Águila o Rock del Canal 11 en 1990, en el que participaron las bandas más representativas del rock mexicano de la época.
También estuvo comprometida políticamente con movimientos sociales en México. Desde que surgió el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) formó junto con otras bandas y personas del medio musical, colectivos como “Serpiente sobre ruedas” que además de realizar conciertos en apoyo, gestionaban la recolección de víveres para comunidades indígenas afectadas por el conflicto armado.
Como vocalista fue la figura icónica de la banda de rock progresivo Santa Sabina, propuesta que vinculaba influencias del jazz, el rock gótico y de músicas orientales. Su participación introdujo elementos provenientes del teatro, evidentes en la puesta en escena de la banda, y en el histrionismo y experimentación vocal en su interpretación, lo que consolidó en las presentaciones de la banda una atmósfera ceremonial. Si bien algunos de las letras eran de su autoría, Santa Sabina realizó colaboraciones con personas como Adriana Díaz Enciso escritora y poeta mexicana. La banda fue un crisol para diferentes expresiones artística.
Zazil nos cuenta que escuchar a Rita Guerrero en Santa Sabina la lleva orgánicamente a encontrarse con María Sabina (1894-1985) chamana y curandera mazateca, cuya práctica ritual, mística y espiritual se enarboló también a través del canto y la palabra. Expresiones que han hecho que sea considerada en palabras del escritor mexicano Homero Aridjis la mejor poeta de habla española del siglo XX (aún cuando nunca escribió en español), apreciación con la que coincide Zazil Collins, siendo sus cantos una manifestación compleja que desborda los límites entre música, palabra y magia. Y nos permiten una aproximación y comprensión distinta de estos campos de creación.
(…)
Soy la mujer arrancada.
Soy la mujer que llora.
Soy la mujer que chifla.
Soy la mujer que hace sonar.
Soy la mujer tamborista.
Soy la mujer trompetista.
Soy la mujer violinista.
Soy la mujer que alegra
porque soy la payasa sagrada.
Soy la mujer piedra del sol.
Soy la mujer luz de día.
Soy la mujer que hace girar.
Soy la mujer del cielo.
Soy la mujer de bien.
Soy la mujer espíritu
porque puedo entrar y puedo salir
en el reino de la muerte.
Poema de María Sabina
Otro de sus referentes fundamentales es Anne Waldman (1945) poeta, docente, editora, feminista, activista norteamericana, su obra se ha vinculado con la Generación Beat. Es cofundadora de Jack Kerouac School of Disembodied Poetics junto con Allen Ginsberg, en la Universidad de Naropa en Colorado. En 2011 fue elegida miembro de la Academia de Poetas Americanos. Su escritura se interesa en prácticas alternativas de poesía, desde un enfoque experimental que la lleva a realizar cruces interdisciplinares, regularmente trabaja en colaboración con personas que hacen música, bailarines, cineastas y artistas visuales.
En su trabajo existe la comprensión performática de la poesía, su relación con la idea de ritual, con la respiración el canto y el movimiento. El poema de 1996, Fast Speaking Woman, es el parte aguas dentro de su trayectoria, en él exploró dichas relaciones. Con este homenaje a María Sabina retoma la musicalidad inherente a su palabra, celebra la energía femenina. Esto la llevó a impulsar propuestas que entrecrucen literatura, performance y música, y fundó junto con su hijo Ambrose Bye, músico y compositor, el sello discográfico Fast Speaking Music.
Es así como el trabajo polifacético e interdisciplinar de Rita Guerrero y Anne Waldman, y la figura cardinal, compleja y mágica de María Sabina han sido referentes claves para los intereses de Zazil, y son formas extraordinarias para transmitir ideas y mensajes que trascienden una comprensión racional. Reconociendo que en el mundo desigual en el que estamos, las palabras conjuradas por mujeres son existencia misma, y conocer el trabajo de estas maravillosas mujeres es sobretodo una invitación para que tomemos la palabra, para habitar, para existir, para crear y para hacer magia.