Si te interesa el manga (o has oído hablar de él) seguro has escuchado que se clasifica en Kodomo, Shonen, Josei y Seinen dependiendo de la audiencias que lo consuma, pero ¿qué significa eso? ¿me puede gustar todo o sólo lo que va dirigido a mí? Nuestra genia del mes nos lo explica, y además nos recomienda a mujeres que están protagonizando o creando grandes historias, alejadas del consumo y producción masculina, terreno asociado al Universo del manga.
Ella es Áurea Xaydé Esquivel Flores, especialista en literatura juvenil e infantil y que a raíz de su interés, como lectora e investigadora, en el cómic y el manga, es parte de la Red Iberoamericana de Investigadores en Anime y Manga. un espacio pensado para nuclear a quienes investigan estos bienes culturales japoneses y ayudar a la difusión de sus trabajos académicos en castellano y portugués.
Para empezar, Áurea no explica que en muchas de las historias de manga o anime los personajes femeninos y masculinos reproducen una serie de estereotipos de género, por ejemplo abundan los dibujos de personajes altamente sexualizados, al mismo tiempo que se tiene la idea de que a las mujeres sólo les interesan cierto tipo de temáticas o “historias femeninas”.
Oponiéndose a estas ideas preconcebidas están las genias mangakas, autoras mujeres que permiten otras posibilidades de representar a las protagonistas, dibujandolas como valientes, inconformes, curiosas, incansables, críticas, solidarias, chambeadoras, tenaces y diversas. Lo que también provoca que cada vez más los géneros y subgéneros en el manga rompan límites en relación a sus divisiones establecidas.
KAMOME SHIRAHAMA
Ella es una genia del lápiz y el dibujo, trabaja creando portadas para Marvel Cómics, aunque su presencia es reciente, sus historias siempre vienen cargadas de fuerza y complejidad. Comenzó creando My Little Noir, y desde 2016 es autora de Atelier of Witch Hat. historia que va en su cuarto volumen y nos cuenta la vida de 4 niñas aprendices de brujas, cada una desde su propios deseos e ideas nos muestra una relación diferente con la magia.
YUMIKO SHIRAI
Esta artista japonesa recibió el Gran Premio de Ciencia Ficción y Fantasía de Japón por Wombs, un manga futurista cuya historia se desarrolla en un contexto de guerra contra alienígenas superiores tecnológicamente, para contrarrestar tal ventaja hay una sección de elite dentro del ejército humano denominada “Cuerpos de Transferencia”, y que está conformado exclusivamente por mujeres a quienes les fue implantado un feto de una especie alienígena nativa, Niebass, que les permite capacidad de teletransportación, durante el embarazo.
De acuerdo con Áurea más allá del nivel de detalle Wombs es una serie que disloca el rol del embarazo y a su vez plantea problemas sobre la cosificación de los cuerpos en el aparato militar. Devela desde un mundo ficticio la doble moral con que las mujeres son juzgadas y rechazadas por cargar en sus cuerpos alienígenas, y aún así ser los elementos más importantes para sostener la guerra. De esta manera es una historia que logra generar dilemas éticos y psicológicos de la mano de los personajes, dentro de los cuales hay mujeres que fueron reclutadas a la fuerza, hasta quienes se enrolaron por convicción.
KEI OHKUBO
Esta autora basó sus creaciones de manga en la pintora barroca italiana, Artemisia Gentileschi, ella fue la primera mujer en integrarse a la Accademia di Arte del Disegno de Florencia, y muestra en sus pinturas a mujeres que, al igual que ella y sin importar el costo que significaba, no dieron su brazo a torcer sobre sus decisiones, creencias y deseos, aún enfrentando lo peor de las violencias machistas.
De este modo aún cuando la obra de Ohkubo es una interpretación libre realizada desde el 2013, su protagonista Arte y quien da nombre al manga, tiene que enfrentar a la sociedad retos, trabajos y tareas para cumplir su cometido y poder legitimarse en un espacio exclusivo de los hombres. Del mismo modo en su camino se encuentra a diferentes personajes, con los que se relaciona de una manera sincera y solidaria, pero siempre desde un punto de vista crítico e inconforme con los roles que se supone ellas y ellos deben ocupar.
JUNKO IKE
La última recomendación que nos presenta Áurea es el manga hecho por Junko Ike, titulado Mizutama Honey Boy, una historia de romance entre Mei la capitana del equipo de kendo de su escuela. Este manga una aproximación lúdica a los roles de género, pues si bien se trata de una historia de amor adolescente heterosexual, ésta voltea y hasta cierto punto ironiza el deber ser de las actitudes, formas, comportamientos y acciones de mujeres y hombres en una relación amorosa. Por un lado Mei no cumple con los estereotipos de belleza asociados a las mujeres y Shirou, su compañero, es reconocido por su expresividad feminizada.
ROMPER LOS DOGMAS DE LA CULTURA JAPONESA
Áurea que actualmente es responsable de la Biblioteca Comunitaria «Alaíde Foppa», de la Unidad de Vinculación Artística en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco (UNAM), nos explica que el manga se clasifica a partir de dos ejes principales, en relación a un aspecto demográfico, y según sus géneros.
El aspecto demográfico de manera general se divide en Kodomo para niñas y niños, Shojo dirigido a mujeres adolescentes, Shonen para hombres adolescentes, Josei para mujeres adultas y el Seinen para hombres adultos, o público maduro en general.
La clasificación en relación a los géneros es compleja, debido a que no solamente abarca desde los géneros conocidos como suspenso, aventuras, acción, romance, etc. sino que también algunos de estos están definidos a su vez por factores situacionales, como por ejemplo la etapa de la vida escolar, o temáticos como la tradición cultural de las artes marciales. Adicionalmente esta división de géneros y subgéneros, es difícil de categorizar pues los mangas pueden contener diferentes géneros a su vez, o pueden mutar a medida que la historia transcurre.
Debido a la clasificación demográfica de los mangas se suele asumir que las mujeres autoras sólo escriben para mujeres, es decir dentro de Shojo y Josei particularmente, y que sus temas sólo tratan sobre el amor romántico, pero en realidad hay autoras que han creado historias de acción, fantasía, ciencia-ficción y terror, e incluso historias protagonizadas por hombres, y que son grandes referencias dentro del Shonen, que es el género más taquillero en el manga.
Si bien las historias de las que nos habla Áurea no son productos explícitamente feministas, al ser creados por mujeres se complejiza a los personajes y a las historias desde otra perspectiva que la producción hecha por hombres no hace.